Clasificación de los partos
Por lo general, los bebés nacen entre la semana 38 y la 42, a esto se le conoce como «embarazo a término«. Se cree que es debido al envejecimiento de la placenta que modifica el equilibrio hormonal materno y que posiblemente desencadena las contracciones.
¿Cuáles son los tipos de partos? Básicamente existen dos tipos de partos: el comúnmente denominado «normal» y la cesárea. El primero de ellos es aquél por medio del cuál el bebé desciende a través del canal de parto, culminando por el paso de la vagina de la mamá. El segundo, es el mecanismo por el cuál un bebé es extraído por medio de intervención quirúrgica.
Ahora bien, existen diferentes modalidades de parto:
Parto natural
esta modalidad implica que la mamá esta dispuesta a hacer lo que sea necesario para evitar los analgésicos durante el proceso de alumbramiento. Para lograrlo es entrenada previamente mediante un curso de preparación al parto que incluye; técnicas para el manejo del dolor tales como, ejercicios de respiración, relajación, así como práctica de posiciones para el parto, entre otros.
Beneficios del parto natural
Ventajas del parto natural para mamá:
►Mejora la presión arterial.
►Mejora el aporte de oxígeno a la placenta y al bebé.
►Mantiene estables los niveles de azúcar en la sangre.
►Disminuye la posibilidad de desgarros en vagina.
►Facilita la integración de la madre consigo misma.
►Evita la entrada al quirófano (área poco relajante).
►Puede estar caminando y cambiando de posiciones.
►Tiene la intimidad de una habitación.
►Mínimas intervenciones.
►Se evita la venoclisis, el enema, la tricotomía y la episiotomía.
►Evita los efectos secundarios de la analgesia.
►Sentimiento de logro.
►Aumenta la auto estima y la confianza en ella misma.
Ventajas del parto natural para el bebé:
►Arroja todo el líquido del pulmón.
►Mejora la oxigenación general y cerebral.
►Esta más preparado para enfrentar los cambios.
►Esta más alerta.
►El apego materno favorece la producción de leche.
►Permanece en la habitación con sus padres.
Fuente: Centro Nacer en Plenitud, Curso de Preparación al Parto.
Parto con uso de analgésicos:
como su nombre lo indica, se recurre al uso de un anestésico llamado epidural, este se inyecta en la zona lumbar de la columna vertebral. Su función es eliminar el dolor provocado por el trabajo de parto, sin embargo, la madre puede participar activamente durante el nacimiento de su bebé. En algunos casos cuando las contracciones tienden a ser irregulares o estas han cesado, el médico valorará el uso de oxitocina, sustancia que permite que las contracciones se vuelvan regulares y efectivas, para lo cual se requerirá el uso del analgésico.
Alternativas de parto
Actualmente se cuentan con diferentes opciones de parto que ayudan a que el proceso se desarrolle de una forma más suave tanto para la mamá como para él bebé. Si bien se habla cada vez mas sobre este tema, se recomienda que no se tome la decisión a la ligera, es decir, querer hacerlo simplemente por la falsa creencia de que «esta de moda«, pues este concepto va mas allá de lo que se dice, es toda una filosofía que bien aplicada realmente funciona.
No esta de más el subrayar que, para dirigir estas técnicas tendrá que hacerlo un médico gineco-obstetra especializado en estos temas; que cuente con un grupo a su vez entrenado y calificado para ello con experiencia previa.
Dentro del equipo que atiende este tipo de partos se encuentra el gineco-obstetra, el pediatra, la doula y si se llega a requerir, el anestesiólogo. Todos ellos como grupo practican la filosofía que se conoce como parto humanizado. Esta consiste en, respetar los valores, creencias y decisiones de mamá y papá sobre cómo quieren que nazca su bebé; bajo qué circunstancias; en que lugar; entre otras opciones.
Cabe destacar que, el parto humanizado no excluye a la cesárea de su filosofía, en caso de ser necesaria una intervención quirúrgica se cuida al máximo el vínculo entre la pareja y su bebé, evitando así el abuso de la tecnología. No se trata de obsesionarse con el parto sino de prepararse para llegar a ese momento de una manera responsable.
Por lo tanto, si eres de la idea de un parto humanizado tendrás que darte a la tarea de investigar con antelación quién puede proveerte de ese servicio en tú lugar de residencia o tal vez tengas que desplazarte a otro para conseguirlo. Lo más importante es estar bien informada para tomar las decisiones acertadas.
Opciones para un parto suave
Dentro de las modalidades para el parto, como ya se mencionó natural o con uso de analgésicos, se encuentran las opciones de parto que permiten medidas de confort para la mamá y él bebé que harán del evento una experiencia positiva. Estas pueden combinarse entre sí para maximizar los resultados.
►Parto en agua: este tipo de parto trae consigo ventajas adicionales al parto natural, pues además de las ya mencionadas en ese apartado, encontramos las siguientes:
Para mamá:
+Disminución de la sensación dolorosa.
+Puede acortar el trabajo de parto.
+Aumenta la relajación, sobre todo en vagina.
+Se adoptan posiciones más cómodas.
Para el bebé:
+Facilita y mejora su circulación.
+El tránsito de adaptación es más suave.
+Permanece dentro del agua en brazos de mamá.
+Pueden disfrutar mamá, papá y bebé dentro del agua.
Fuente: Centro Nacer en Plenitud, Curso de Preparación al Parto.
►Parto en casa: esta opción de parto tiene la principal ventaja de la comodidad propia que brinda el hogar de la pareja, ya que desde el inicio del trabajo de parto se permanece en su propio ambiente, al que esta habituada, lo que permite tener mayor relajación durante todo el proceso. El parto en el hogar puede estar asistido por el grupo de especialistas que llevaron el control del embarazo de la mamá. Esta modalidad es para mujeres que han llevado un embarazo saludable y sin complicaciones.
►Parto en el cuarto de un hospital: afortunadamente, en la actualidad se cuenta con hospitales que están aceptando la filosofía del parto humanizado, respetando los ideales de las parejas y a su vez coordinando sus servicios con los equipos de asistencia para este tipo de partos. Han adaptado sus instalaciones que incluyen áreas de maternidad apartadas del resto, cuartos con tinas para atender partos en agua, camas convencionales en lugar de hospitalarias y otros elementos que permiten mayor comodidad.
¿Qué significa doula?
Te estarás preguntando, qué es y qué hace una doula. El término doula viene del griego y se usa para describir a una mujer que ayuda a otra mujer durante su embarazo, a prepararse para el momento del parto, el post-parto y la lactancia. Ofrecen apoyo tanto físico como emocional durante todo el proceso. A través de su experiencia y conocimiento harán que el parto sea más suave.
En otras palabras, adoptan el papel que existía anteriormente en las familias; cuando cotidianamente desde pequeñas las mujeres veían el proceso del parto y la lactancia de una forma natural. El conocimiento era transmitido de generación a generación. Debido a que esa buena costumbre prácticamente ha desaparecido, entre otros aspectos por la incorporación de las mujeres al campo laboral, es que surge la figura de la doula.
Pero no sólo eso, la doula es quien ánima y conforta a la mamá para que no pierda de vista su objetivo. Estadísticamente se ha demostrado que gracias a ellas, se han evitado cesáreas, los partos logran ser más cortos y menos dolorosos. Para conseguirlo, se valen de técnicas como: relajación y respiración, masajes, hidroterapia, y visualización.
Recomendaciones para la atención del parto normal 1996, Organización Mundial de la Salud (OMS)
La Organización Mundial de la Salud (OMS), encargada de coordinar la acción sanitaria en el sistema de las Naciones Unidas; emitió un informe presentado por su grupo técnico de trabajo del Departamento de Investigación y Salud Reproductiva en el año 1996. Este habla sobre la atención del parto normal mediante una guía práctica. En su apartado número seis se clasifican en cuatro sus recomendaciones.
Es importante que lo leas y lo analices, ya que este es el fundamento y justificación sobre «el parto humanizado».
Prácticas que han demostrados ser útiles y deben fomentarse | Prácticas claramente dañinas o ineficaces y que deberán eliminarse | Prácticas de las que existe evidencia insuficiente para apoyar su clara recomendación y deben ser utilizadas con cautela en tanto más resultados de investigación clarifican estos | Prácticas que con frecuencia son utilizadas inapropiadamente |
Desarrollo de un plan de parto por la mujer embarazada y su familia. | Aplicación rutinaria del enema. | Métodos no farmacológicos para reducir el dolor del parto, como plantas, inmersión en agua, estimulación de los nervios. | Restricción en la ingesta de sólidos y líquidos durante el parto. |
Determinación de riesgo. | Uso rutinario del afeitado del vello púbico. | Amniotomía (romper artificialmente la membrana que contiene el líquido amniótico) temprana de rutina en la primera etapa del parto. | Control del dolor mediante agentes sistémicos. |
Monitoreo del bienestar físico y emocional de la mujer durante el trabajo de parto y el nacimiento. | Aplicación rutinaria de soluciones intravenosas. | Presión en el fondo uterino durante el parto. | Control del dolor con anestesia epidural. |
Ofrecer líquidos orales durante la labor y el parto. | Aplicación profiláctica de cánula intravenosa. | Maniobras relacionadas con la protección del periné y del manejo de la cabeza fetal al momento del nacimiento. | Monitoreo fetal electrónico. |
Apoyo con empatía por los profesionales de salud durante la labor y el parto. | Utilización rutinaria de posición supina (recostada sobre la espalda) durante el trabajo de parto. | Manipulación activa del feto al momento de nacer. | Uso del uniforme y máscaras esterilizadas durante el parto. |
Respeto a la elección de la mujer de los acompañantes en el parto. | Examen rectal. | Aplicación rutinaria de oxitocina, tracción del cordón o la combinación de ambas durante la tercera etapa del parto. | Exámenes vaginales frecuentes y repetidos, especialmente por más de un proveedor de la salud. |
Dar a la mujer toda la información y explicación que desee. | Pinzamiento temprano del cordón umbilical. | Conducción del parto con oxitocina. | |
Métodos no invasivos y no farmacológicos para aliviar el dolor en el parto, tales como masajes y técnicas de relajación. | Administración de oxitócicos en cualquier etapa del parto de manera que su efecto no pueda ser controlado. | Estimulación de los pezones para aumentar la contractibilidad uterina durante la tercera etapa del parto. | Movilización rutinaria de la partera a un cuarto diferente al iniciarse la segunda etapa del parto. |
Monitoreo fetal intermitente. | Uso rutinario de la posición de litotomía (posición acostada de la mujer para parir). | Cateterización de la vejiga. | |
Libertad de posición y movimiento durante el trabajo de parto. | Esfuerzos de pujo dirigidos y sostenidos (maniobra valsalva) durante la fase expulsiva del parto. | Recomendar a la mujer que puje cuando la dilatación se ha completado y antes de que ella sienta deseos de empujar. | |
Evitar la posición supina (recostada sobre la espalda) en el trabajo de parto. | Masaje y estiramiento del perineo por parte de la persona que asiste el parto durante la etapa de expulsión. | Rigidez de estipular la duración de la segunda etapa del parto, como en una hora, si las condiciones maternas y fetales son buenas y existe progreso en el parto. | |
Monitoreo cuidadoso del progreso durante el trabajo de parto. | Operación cesárea. | ||
Contacto temprano piel a piel entre la madre y el niño, y apoyo para el inicio de la lactancia en la primera hora post-parto. | Uso rutinario o liberal de episiotomía (incisión quirúrgica en la zona del perineo para que salga más rápido el feto). |
Si te pareció interesante, no te pierdas la segunda parte de este artículo.
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